25, desde Fbk

Hace un rato releía una nota que escribí en facebook en la que tenía que escribir 25 cosas 'al azar' sobre mí. Creo que en ese momento no demoré tanto, pero tampoco tan poco, teniendo en cuenta que escribir sobre uno mismo es algo que por pasajes puede resultar más confuso de lo que parece. Fuera de todo eso, al releer dicha nota con líneas un tanto sin sentido (quizás la mayoría), yo sentí que estaban bastante bien presentadas en términos de que sí eran cosas verdaderas y que también sí tenían sentido, incluso la última, que era un 'y eso...'. Y si bien 25 líneas no son suficientes para describir a alguien, claramente puede conseguirse una representación un tanto acertada, aunque no quizás con estas mismas palabras, sino que podría ser algo con palabras mucho más bien elegidas con el fin de querer representarse mejor ante un posible lector o quizás sólo como un ejercicio.

Yo no estoy queriendo conseguir algo con esto, pero me llamó la atención lo que alguna vez fueron líneas en momentos de ocio (quizás esto puede parecer que es lo mismo), hoy fué algo más que eso.

No hablo todo

Y yo no sé si alguna vez llegará ese día, porque parece que no es algo ciertamente posible... ciertamente la mente es más rápida que la boca. A lo que me refiero es que no creo que alguna vez pueda pasar lo que derepente tengo ganas de hacer y es que mi boca diga todas las cosas que en realidad pienso y que de esa manera no haya nada que la mente tenga bajo su poder y no se lo enseñe al exterior como suele pasar en innumerables ocasiones. Y en realidad no sé si realmente es lo que me gustaría que pasara, pero en algunos momentos es algo que suena como una opción que podría mostrarse tan aliviadora que seduce bastante.
En todo caso, lo que sí desearía más, sería poder decir lo que yo quiera a quien yo quiero y sin ninguna represión personal, lo que de por sí es más difícil de lo que parece, porque si bien soy libre de decir lo que quiero y a quien quiero, soy yo mismo el que se quita esa libertad.

Lo bonito del pasado

Hoy salí de antojado a comprarme un par de Chandelles y a caminar un poco solo y con música, al igual que ayer. Con demasiadas cosas que me pasan por la cabeza y que siguen siendo tan redundantes como muchas otras veces, sentía que necesitaba salir y caminar y que eso quizás me haría bien. Aunque en un momento me sorprendió el pensar sobre algo también recurrente, pero de igual manera resultaba un poco novedoso.
Y es que siempre he pensado que cambiar cosas que han ocurrido en el pasado sería un poder demasiado grande y que claramente no lo tiene nadie. Y claro que sí me gustarían cosas distintas, pero no eran esas cosas las que me hacían pensar mientras caminaba de vuelta a mí casa con los postres que tanto me había costado encontrar. Pensaba mucho en los momentos que quizás ocurrieron en días parecidos como hoy, un día primaveral donde se hizo tan agradable caminar, recordaba que muchos días en vez de quererlos cambiar, anhelaba poder vivirlos de nuevo... cosa que excede las posibilidades humanas claro, pero me hubiera gustado revivir momentos en los que reí, caminé, disfruté y que quiero cobijar junto a mí de esa manera, como gratos recuerdos. Y nadie sabe las vueltas de este mundo, quizás algún día tenga la posibilidad de vivir momentos semejantes, como una suerte de reencarnación.

Mentiroso

Hace mucho que pienso que la honestidad es una de las virtudes más importantes que puede haber en una persona. Y esto me ha llevado a sostener por mucho tiempo que la peor mentira es cuando uno se miente a uno mismo. Yo sé que soy una persona honesta (para con los demás), pero no me gusta saber que me he estado mintiendo a mí mismo durante mucho tiempo. He hecho lo que justamente yo califico como lo peor dentro de las mentiras.